Carlos Martín, fundador y CEO de la consultora de negocios Hasiapacífico, con sede en Macao, estuvo presente en la decimocuarta edición de la Feria Airshow de China, realizada en Zhuhai del 8 al 13 de noviembre. Se trata de la feria de aviación y tecnología aeroespacial más importante de China, que contó con empresas nacionales e internacionales, en el marco del desarrollo de las políticas de Covid Zero por parte de Beijing, por lo que la convocatoria estuvo condicionada a la situación sanitaria que vive el gigante asiático.
En comunicación con ReporteAsia, Martín comentó que los tres primeros días de la feria, entre el 8 y el 10, el acceso se encontró exclusivamente permitido a profesionales del sector: fabricantes, distribuidores, clientes y, por supuesto, representantes de distintos ejércitos a lo ancho y largo del planeta. En su caso, estuvo presente en la ocasión como representante de varias firmas españolas y latinoamericanas del sector, lo mismo que como agente del "Escuadrón Fénix" de ex-combatientes de la Guerra de Malvinas, para quienes realiza una campaña de relaciones institucionales en la República Popular China.
Asimismo, Martín destacó que esta edición ha sido característica por la evidente presencia de los patrocinadores y sus productos, esto es, el People’s Liberation Army: "Fue una puesta en escena que ha dejado en segundo plano a fabricantes de componentes y otros productos menores relacionados con la aviación. Si bien, la Feria se identifica con la industria aeronáutica, en esta ocasión se ha dedicado un espacio nada despreciable a las capacidades terrestres de la industria nacional China".
De hecho, indicó que un pabellón entero anexo al salón principal aglutinó una amplia variedad de vehículos cuya aplicación militar era directa: "Desde vehículos tácticos a vehículos con capacidad de proyectar su efecto en muy largas distancias. No es un secreto la capacidad china en el campo de los cohetes cuyos inicios se remontan al final de la segunda guerra mundial y que ahora suponen una amenaza directa a cualquier tránsito no deseado en su entorno".

"La Feria, si bien ha contado con la presencia de expositores con productos muy adecuados para compradores con restricciones presupuestarias pero que requieren cierto nivel de calidad, su presencia ha sido menor de lo esperado", añadió.
Por otra parte, expresó que notó que el fuerte peso de la tecnología "en muchos de los desarrollos presentados muestra un aspecto doctrinal que quizás desatiende en exceso el aspecto humano del combate o incluso de la enseñanza en el combate".
Sobre el perfil tecnológico y de los materiales ofrecidos, el entrevistado considera que "La práctica inexistente experiencia china en un campo de batalla convencional en los últimos casi cincuenta años parece hacerles buscar soluciones en la IA y el uso masivo de datos. La guerra en la distancia y sin efectivos humanos, salvo delante de un joystick, parece el camino elegido por el segundo ejército más potente del planeta".
Y aunque estima que los desarrollos que pudo ver en primera persona son sorprendentes, no le queda claro, después de haber asistido a la última edición del Airshow si serán capaces de testarlos en combate real antes de que China los necesite: "ya que para eso, otros ejércitos, con urgencias inmediatas y conflictos vivos, tienen que adquirirlos. Y eso, no parece que en Pekín sea una opción, por ahora".
En este sentido, "si nos remitimos a los pabellones y stands de la Feria, solo se podía intuir una alianza, al menos en el campo industrial, esto es, con Pakistán", concluyó el empresario español.
Co-fundador de ReporteAsia.