
Los líderes de Japón, Australia, India y Estados Unidos acordaron el sábado perseguir una región libre de “intimidación y coerción”, renovando su compromiso de preservar un orden basado en normas frente a las ambiciones militares y económicas de China.
Reunidos al margen de la cumbre del G7 en Hiroshima, también esbozaron algunos principios de la asociación, conocida como Quad, a la hora de hacer frente a los desafíos en la región Indo-Pacífica. Entre ellos figuran la gestión “responsable” de la competencia y la colaboración “transparente” con otros socios regionales.
El Primer Ministro japonés, Fumio Kishida, afirmó que “el entorno de seguridad se ha agravado aún más” y que “el orden internacional basado en el Estado de derecho está amenazado”, mientras se sentaba junto a otros líderes.
En tales circunstancias, dijo que es especialmente importante animar a la comunidad internacional a que haya más “cooperación” y no “división y confrontación”.
El Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que una de las misiones de la agrupación es demostrar “la capacidad de las democracias para cumplir”.
“Nuestra visión es la de una región pacífica y próspera, estable y segura, respetuosa de la soberanía, libre de intimidación y coerción, y en la que las disputas se resuelvan de acuerdo con el derecho internacional”, afirmaron en una declaración conjunta hecha pública tras sus debates.
Narendra Modi presente en las cumbres del G7 en Hiroshima y del FIPIC III
China ha criticado a la agrupación por considerarla una versión asiática de la OTAN, aunque no es una alianza de seguridad, y las áreas de cooperación incluyen ahora las infraestructuras y las tecnologías críticas, el cambio climático y el espacio exterior.
Teniendo en cuenta el creciente uso de medios económicos por parte de China para impulsar sus intereses estratégicos, la declaración de la Quad, sin nombrar al país, decía: “Buscamos una región en la que todos los países y pueblos puedan ejercer la libre elección sobre cómo cooperar y comerciar basándose en la asociación, la igualdad y el respeto mutuo.”

Los líderes celebraron la puesta en marcha de iniciativas en materia de infraestructuras, como la mejora conjunta de los cables submarinos para lograr una mejor conectividad a Internet en toda la región, según el gobierno estadounidense.
Los cuatro países, que organizaron la primera cumbre hace sólo dos años, coinciden en muchos aspectos, pero la postura de India sobre la guerra de Rusia contra Ucrania no está en sintonía con los demás.
El Primer Ministro japonés, Fumio Kishida, afirmó que “el entorno de seguridad se ha agravado aún más” y que “el orden internacional basado en el Estado de derecho está amenazado”, mientras se sentaba junto a otros líderes
La tercera cumbre cuatripartita en persona se celebró al margen de los debates del G7, horas después de que el Presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, llegara a la ciudad japonesa para conseguir más apoyo para su país.
Discutieron “francamente” las posibles implicaciones de la crisis ucraniana en la región Indo-Pacífica, según el gobierno japonés.
India, que mantiene estrechos lazos militares y económicos con Rusia, se ha abstenido de condenar a Moscú por su invasión de Ucrania. Queda por ver si Japón, Australia y Estados Unidos pueden acercarse a India en este asunto.
Kishida invitó al primer ministro australiano, Anthony Albanese, y al primer ministro indio, Narendra Modi, a participar en algunas partes de la cumbre de tres días del G7, que concluye el domingo.
En un principio, la cumbre Quad iba a celebrarse en Sydney el próximo miércoles, después de que Biden hiciera una parada prevista en Port Moresby, la capital de Papúa Nueva Guinea. Pero esos planes se desecharon justo un día antes de que Biden partiera hacia Hiroshima, ya que había decidido centrarse en las negociaciones sobre el techo de la deuda en Washington.
“Les pido disculpas de verdad por tener que venir aquí en lugar de estar yo en Australia ahora mismo. Pero tenemos un pequeño asunto en casa al que tengo que prestar atención”, dijo Biden en su declaración inicial cuando se reunió a solas con Albanese a primera hora del sábado.
Cuando se le preguntó si estaba ansioso por las conversaciones sobre la deuda con los líderes del Congreso, Biden respondió: “En absoluto” y dijo a Albanese: “Sigo creyendo que podremos evitar un impago”.
Biden prometió recibir a Albanese en una visita de Estado a finales de año en Washington.